Carlos Aquino, Coordinador del CEAS
La pandemia del COVID-19 ha traído consecuencias devastadoras
para todo el mundo, y para Latinoamérica en particular. Sera la región más
golpeada económicamente, y en número de infectados y fallecidos esta entre las más
afectadas también.
La pregunta que se plantea es porque eso es así, y en
todo caso ¿qué se puede aprender de la experiencia de China, y de otros países
asiáticos, que han logrado en gran medida controlar la pandemia con un numero
bastante menor de infectados y fallecidos? También muchos de esos países
tendrán un impacto negativo bastante menor en sus economías, especialmente si
se les compara con lo que sucederá a los países latinoamericanos.
En este artículo
se tratará de responder esas preguntas. Este se dividirá en cinco partes:
Primero, la experiencia del Perú y Latinoamérica con la pandemia COVID-19; Segundo,
lo que enseña esta pandemia desde la perspectiva social y económica; Tercero,
los prejuicios y errores en el combate contra COVID-19 en América Latina; Cuarto,
las perspectivas desde el Perú de lo vivido por China, que se puede aprender de
este país y otros en Asia; y Quinto y último, se darán unas Conclusiones.
1.
La
experiencia del Perú y Latinoamérica con la pandemia COVID-19: Efectos en número
de infectados, fallecidos y en la economía
Lo primero que se tendría que decir es que el análisis
que se haga de los efectos de la pandemia es en cierta forma uno parcial e
incompleto, pues la pandemia aún está en pleno desarrollo en muchos países del
mundo, incluido Latinoamérica y el Perú, y no está controlada aún. Así, las
cosas pueden ser más complicadas de lo que parecen, la economía puede caer más
de lo proyectado, y en el caso de infectados y fallecidos es obvio que con el
paso del tiempo el número será mayor de lo que se mencione en este artículo.
En todo caso, al 28 de junio del 2020, que es la fecha en
que este artículo se termina de redactar, de los 28 países más afectados en número
de fallecidos e infectados, 5 son de Latinoamérica. En número de fallecidos
Brasil está en el lugar 2 en el mundo, México en el 7, Perú en el 11, Chile en
el 16, Ecuador en el 20, y Colombia en el 22. En número de infectados Brasil
también está en el segundo lugar en el mundo, y Perú y Chile están entre los 10
primeros. En número de infectados con seguridad la cifra será mayor en Brasil y
México, pues a diferencia de otros países, como Perú y Chile, por ejemplo, no
han hecho tantas pruebas. Brasil solo ha hecho 1.8 veces más pruebas que el Perú,
a pesar de que su población es 6.5 veces más; y México ha hecho solo la mitad
del numero de pruebas que Chile, a pesar que su población es 6.7 veces mayor. Ver
Cuadro 1.
Cuadro 1: Indicadores
de países afectados por el COVID-19, por número de fallecidos, número de
infectados, y numero de pruebas realizadas.
También en el Cuadro 1 se puede ver que Chile y Perú
tienen el mayor número de infectados por millón de habitantes en el mundo,
Chile en primer lugar con 14,296.7 y Perú en segundo lugar con 8,627.6.
Pero en términos de los efectos en la economía, la región
de Latinoamérica será la más golpeada en el mundo. De acuerdo a proyecciones
del Banco Mundial publicada el 8 de junio del 2020 la economía de la región caería
un 7.2% anual el 2020, frente al promedio mundial de una caída de 5.2%. Ver
cuadro 2.
Cuadro 2. PBI real (variación respecto al año
anterior)
Del estudio del Banco Mundial se ve que, del total de las
economías emergentes y en desarrollo (esto es, excluyendo a las economías
avanzadas) que caerían en su crecimiento más de 5% anual el 2020, que son un
total de 42 países, 15 están en Latinoamérica (o sea prácticamente la mitad de
los países de la región estarán en esa situación). De los 19 países
considerados economías emergentes y en desarrollo cuyas economías caerían más
del 7% anual este año en el mundo, 8 están en la región latinoamericana, esto
es, casi la mitad del total de ese grupo, y esta cifra representa a casi un
cuarto de los países de la región. Ver Cuadro 3 donde está el pronóstico para
los países de la región (se excluye Cuba y Venezuela).
Cuadro 3: Proyecciones para países de Latinoamérica y el
Caribe (crecimiento del PBI real a precios de mercado)
Fuente: World Bank: “Global Economic Prospects”, June 2020, page 86
Finalmente habría que decir que de los 3 países que
tendrían la peor performance económica en el mundo en el año 2020, 2 están en Latinoamérica,
Perú y Belice. El que tendría el peor desempeño en el mundo seria Belice con una
caída de su economía de -13.5% anual, el segundo peor sería Maldivas (país en
el Sur del Asia) con -13.0% y tercero el Perú con -12.0%.
En un informe publicado por el Fondo Monetario
Internacional, FMI, el 24 de junio del 2020, las proyecciones para la economía
de Latinoamérica son más sombrías aún. Se prevé que la región tenga una caída anual
de su economía de -9.4%, la peor entre las economías en desarrollo. Ver Cuadro
4.
Cuadro 4: Últimas proyecciones de crecimiento de Panorama
de la Economía Mundial
Fuente: “Reopening
from the Great Lockdown: Uneven and Uncertain recovery” junio 24, 2020
El 26 de junio el FMI publico las proyecciones para el
crecimiento de Latinoamérica en forma más detallada para algunos países. Ver
Cuadro 5. Como se ve el panorama es bastante sombrío, con varios países con una
caída en su crecimiento anual para el 2020 proyectada de más del 10%. El PBI
del Perú caería casi un 14% en esta proyección.
Cuadro 5: Perspectivas para los países de Latinoamérica (Crecimiento
del PBI real, porcentajes)
Fuente: FMI Blog: “ Perspectivas para
America Latina y el Caribe: La pandemia se intensifica” 26 de junio del 2020
2.
Lo que
enseña esta pandemia desde la perspectiva social y económica.
Cabe preguntarse por qué el Perú y Latinoamérica han
tenido un comportamiento tan decepcionante desde el punto de vista social y
económico frente a la pandemia. Esto es importante saber pues la pandemia, como
veremos, esta dejando de ver las muchas carencias que tiene la región, y que será
necesario solucionar, para poder enfrentar otra situación similar en el futuro,
o en todo caso, para que la región tenga un desarrollo social y económico más
equilibrado e igualitario.
Desde el punto de vista social varios problemas se
pueden discernir:
a.
La región tiene una desigualdad en el ingreso de
las más mayores en el mundo. También
el porcentaje de pobreza entre la población es elevado, y la pandemia hará más crítica
esta situación. Según un informe de la CEPAL del 21 de abril del 2020, el nivel
de pobreza pasaría de una tasa de 30.3% a 34.7% en ese año.
Por otro lado, las personas con dinero pueden acceder a un sistema privado de
salud y podrían sortear la pandemia, mientras que la mayor parte de la población
tiene que depender de un sistema de salud pública que en muchos países de la región
es bastante precario.
b.
El sistema de salud pública colapso en muchos
países. En el Perú desde comienzos de mayo en provincias como Loreto, una de
las más pobres del país, ya no había oxigeno ni equipos, como Unidad de
Cuidados Intensivos (UCI), pero desde comienzos de junio lo mismo se empezó a
sentir en Lima, la capital del país, y al 24 de junio se reporta que en Lima el
sistema de salud pública colapso. El
espectáculo de ver a muchas personas comprando oxígeno, con sus propios medios,
como empezó a ocurrir a comienzos de junio en la capital misma es bastante
dramático pues demuestra que el Estado no es capaz de proveer un bien tan esencial
en esta pandemia como es el oxígeno.
c.
Los países latinoamericanos tienen débiles sistemas
de redes de seguridad social. Cuando la gente se queda sin empleo no hay un
seguro de desempleo y la gente se queda sin ingresos. En el caso de la
cuarentena implantada por muchos países eso fue lo que sucedió. Y a pesar de
que varios países implementaron un sistema de transferencia de una cantidad de
dinero a cierto porcentaje de la población, al hacerse la cuarentena larga esos
subsidios no alcanzaban y la gente salía a las calles a conseguirse algún
ingreso. En el caso del Perú, por ejemplo, un estado de emergencia fue
declarado el 16 de marzo y prolongado hasta el 30 de junio (que restringió
muchas actividades, especialmente los dos primeros meses), y a pesar de que el
gobierno empezó a dar subsidios a un porcentaje importante de las familias, la
duración de la cuarentena hizo que sea insuficiente ese dinero.
El Perú implemento uno de los programas más ambiciosos de
entrega de subsidios a la población en Latinoamérica. El gobierno planea
entregar un monto de dinero, equivalente a unos 220 dólares, a 7 millones de
familias, de un total de 9 millones que hay en el país. Incluso la Ministra de Economía
anuncio el 25 de junio que se estudia dar quizás un monto adicional a las
familias más necesitadas.
Sin embargo, los problemas con ese esquema son varios: a
más de tres meses y medio que empezó la pandemia aún no se ha entregado el
subsidio al total de los 7 millones de familias, la entrega de dinero ocasiono
muchas veces aglomeraciones en los bancos donde se dice ocurrieron contagios, muchas
familias se han quedado sin recibir ningún bono pues no están incluidas en la
lista de beneficiarios que se elaboró en base al censo nacional del 2017 (y
la situación económica de muchas personas se dice cambio de esa fecha a la
actualidad), y a todas luces ese bono ha resultado insuficiente dado el largo
periodo de cuarentena que impuso el gobierno. Lo que debió haberse hecho desde
el comienzo es transferir a todas las personas un monto de dinero para cubrir
sus necesidades básicas y así poder implementar una cuarentena estricta, lo que
hubiera permitido reducir el número de infectados y fallecidos, y acortar el
periodo de cuarentena, evitando un mayor impacto negativo en la economía.
d.
Por otro lado, muchos de los gobiernos en Latinoamérica
han demostrado que no son eficientes en su accionar y ha habido casos de
corrupción, incluso con el dinero que se ha destinado al combate a la pandemia.
Desde el punto de vista económico varios problemas
también se pueden señalar, que aquí se resumirían en dos:
a.
La economía de la región en un importante porcentaje
es una economía informal, donde mucha gente trabaja y no obtiene un ingreso
fijo, donde sino trabajan un día no obtienen ingresos ese día. Por eso tampoco tienen
ahorros para enfrentar una situación donde se instaura una cuarentena que
paraliza la actividad económica del país, y que obliga a la gente a estar en
sus casas, como se dio en la mayoría de los países de Latinoamérica. Justamente
esta es la razón que se esgrime para explicar por ejemplo por qué la economía
peruana sufrirá una caída tan grande este año y porque el desempleo ha
aumentado tanto, y el nivel de pobreza aumentara a fin de año. Eso también
explica el gran número de infectados y fallecidos en varios países de la región,
como en el Perú también.
Se dice que en el caso del Perú quizás en un 60% o hasta
un 70% de las personas trabajan en el sector informal,
y por eso a pesar de la cuarentena muchas personas salían a buscar algún
ingreso y eso permitió que las infecciones continuaran aumentando.
b.
Muchas economías de la región dependen cada vez más
del mercado externo, ya sea por ingreso de exportaciones, del turismo, de la inversión
extranjera directa, o de las remesas. Con la paralización de la actividad
económica que hubo en todos los países del mundo durante los primeros meses del
2020, los ingresos por esos conceptos caerán de forma abrupta.
En el caso de las exportaciones, si vemos el caso del Perú,
por ejemplo, las exportaciones de bienes en el 2019 representaron un 20.3% de
su PBI y significo un monto de 47,688 millones de dólares, y
con la economía mundial en caída de 5.2% el 2020 según el BM, o de 4.9% según
el FMI, las perspectivas no son buenas para este sector. La Organización
Mundial de Comercio proyecta que el volumen de comercio caiga un 13% este año
2020 en el mejor escenario (o un 32% en el peor escenario). Adicionalmente,
en el caso de países como México, que dependen grandemente de un solo mercado
como destino de sus exportaciones, el escenario será peor. Este país destina un
80% de sus exportaciones de bienes a EEUU, y este país, como ve en los Cuadros
2 y 4 tendrá una caída en su economía de 7% u 8% anual respectivamente. Además,
la mayoría de los países latinoamericanos dependen mayormente de la exportación
de materias primas, y muchos de estas tendrán una caída en sus precios, y para
algunos como Venezuela, que dependen casi solamente del petróleo, y cuyo
producto ha experimentado una drástica caída de precios, la situación será más crítica
aún.
En el caso de los ingresos por turismo, como se ve en el Cuadro
5, los países dependientes de ese sector en la región verán una caída en su PBI
anual de 10.3% el 2020. Aun para México, un país que también tiene importantes
ingresos por las otras fuentes mencionadas como exportaciones, inversión
extranjera directa, y remesas, los ingresos por turismo representaron el 17.2%
de su PBI en el 2018. Con
la mayor parte del mundo en confinamiento durante la primera mitad del 2020,
las perspectivas de que el turismo pueda alcanzar un nivel cercano al del 2019
están fuera de toda proyección.
En el tema de la inversión extranjera (IED) por ejemplo en
el Perú el 2019 hubo un ingreso de 8,892 millones de dólares por ese concepto,
que represento un 3.8% de su PBI. Pero el 2020 ese ingreso caería en un 82.5%
según proyecciones del Banco Central de Reserva del país. Con
la economía mundial en recesión en el 2020 es lógico que la IED experimentara
también una importante caída ese año. Y en el tema de las remesas, hay países
que dependen fuertemente de esta fuente de ingresos. Por ejemplo, en el 2018
para Haití los envíos de dinero de sus ciudadanos en el extranjero representaban
el 32.5% de su PBI, en El Salvador el 20.7%, y en Honduras represento el 19.9%.
Las remesas son enviadas desde países desarrollados, como América del Norte y
Europa, y como se ve en los Cuadros 2 y 4, las economías de esos países serán
las más golpeadas en el mundo, por lo que las remesas deben también
experimentar una drástica caída el 2020. Por ejemplo, en las proyecciones del
FMI la economía de EEUU caería 8% anual el 2020, y los países de la Zona Euro verán
caer sus economías en 10.2% anual.
3. Prejuicios y errores en el combate contra
COVID-19 en América Latina
Ha habido algunos errores en el combate a la pandemia que
podrían resumirse probablemente en dos:
a.
Lamentablemente algunos gobiernos no entendieron
la magnitud del problema, y aun ahora al parecer lo siguen sin entender. Por
ejemplo, Brasil y México, los países más afectados también, al comienzo dudaron
de implementar medidas contra la pandemia por la posición de sus máximos
líderes, que minimizaron lo que era el COVID-19, tratándolo como un simple
resfriado.
Y aun ahora el presidente de Brasil lo considera así, e incluso apelo una orden
que una corte de Brasil le dio para que use obligatoriamente una mascarilla en
actos públicos.
b.
La discriminación también ha ocurrido por ejemplo
contra las personas de origen oriental que se dio en algún momento, o contra el
personal médico que trabaja en el tratamiento de la pandemia.
Asimismo, hay bastante desinformación, como en otras regiones, sobre el origen de
la pandemia, o sobre los remedios o las posibles curas que se pregonan.
Especialmente en las redes sociales esto se ha vuelto común, con los llamados
“fake news”.
4.
Perspectiva
desde el Perú de lo vivido por China, y que se puede aprender de ese país y
Asia en general
Sorprendentemente el número de fallecidos e infectados en
la región del Asia (en este articulo nos referiremos a los países y economías
del Asia Oriental o Este asiático en particular), ha sido bastante bajo,
especialmente comparado con los países de Latinoamérica. No solo eso, el
impacto en sus economías no seria tan severo como el que experimentaran la
mayoría de los países de Latinoamérica.
Como vemos en el Cuadro 1, China, donde fue el epicentro
inicial de la pandemia, el número de fallecidos lo sitúa en el puesto 19 a
nivel mundial, e Indonesia aparece en el puesto 23. La misma fuente indica que
Filipinas está en el puesto 34, y países como Japón y Corea del Sur, tan cercanos
a China geográficamente y con una relación tan estrecha en áreas de comercio y turismo,
por ejemplo, aparece recién en el puesto 37 y 60 respectivamente. Si
consideramos el número de fallecidos por millón de habitantes en Brasil es de 272.8,
en México es 209.1, en Perú es 285.6, en Chile es 285.5, y en Ecuador es 259,
que son los más afectados en Latinoamérica. Pero en el Asia Oriental esos
números son bastante menores. En China el número de fallecidos por millón de
habitantes es 3.3, en Indonesia es 10.3, en Filipinas es 11.7, en Japón es 7.7,
y en Corea del Sur es solo 5.4. Y Vietnam no tiene ningún fallecido según sus
estadísticas oficiales. Hay que recordar que gran parte de estos países
asiáticos ya han controlado la epidemia mientras que en Latinoamérica aún no
(aunque siempre hay el peligro, en Asia, y en todo el mundo, de la ocurrencia
de una segunda ola de contagios).
Lo anterior es interesante, pues esos países asiáticos tienen
una población numerosa, varios de ellos tienen territorios pequeños, son
densamente poblados, y bastante urbanizados. No solo eso, China está cercano
geográficamente a ellos, con fuertes lazos comerciales entre ellos, y turistas
chinos visitando esos países en gran número. Y aun así lograron controlar en
gran parte la pandemia con un menor número de infectados y fallecidos. En número
de infectados, por ejemplo, ninguno de esos países aparece entre los 20 primeros
en el mundo.
¿Porque eso es así? Se podría mencionar varias razones,
que pueden servir de lecciones para Latinoamérica:
a.
Esos países actuaron rápidamente para controlar el
contagio. Inicialmente después de que China decreto la cuarentena en la ciudad
de Wuhan el 23 de enero, el lugar donde se reporto primero el contagio masivo,
esos países empezaron a controlar el ingreso de posibles personas infectadas.
Vietnam por ejemplo se dice que ya en enero 11, incluso antes de que la cuarentena
de Wuhan ocurriera, y ante las noticias de lo que sucedía en China, empezó a
implementar controles sanitarios en los aeropuertos, tomando por ejemplo
temperaturas a los pasajeros.
b.
Implementaron políticas para aislar en forma
efectiva a los primeros infectados, y hacer pruebas a los posibles sospechosos
de infección. La cuarentena en los países y economías del Noreste Asiático no
fue siempre total, excepto en China y en Vietnam, pero la invocación que el
gobierno hizo a la población para permanecer en sus casas y/o restringir sus
movimientos usualmente se cumplió. En el Sudeste Asiático, como Indonesia y
Tailandia si hubo una cuarentena obligatoria.
c.
Esos países, especialmente en el Noreste Asiático,
trataron de ayudar a su población, que vio también una caída en sus ingresos
por una restricción en la actividad económica, dándoles bonos. Los más
generosos han sido Japón y
Corea del Sur que han dado a prácticamente toda su población bonos para
amenguar la caída de sus ingresos, y por ende la caída en el consumo y la demanda,
y la caída en la economía en general.
d.
Se podría alegar que China, Japón, Corea del Sur,
por ejemplo, tienen más recursos económicos que muchos países en Latinoamérica,
y es así en verdad, pues son países mas desarrollados, con un ingreso per
cápita por ejemplo en China de 10 mil dólares anuales, y en el caso de Corea
del Sur, dos veces y medio más ese nivel y de Japón cuatro veces el nivel de
China. Pero países como Indonesia tienen un nivel de ingresos similar o menor a
varios países de Latinoamérica, y Vietnam incluso tiene un ingreso per cápita
menor a la mayoría de los países de la región. Vietnam tiene un ingreso anual
que es menos de la tercera parte de Brasil y menos de la mitad del Perú, y,
como se comentó, de acuerdo a cifras oficiales, Vietnam no registra ningún fallecido
por el COVID-19.
e.
Como el caso de Vietnam también lo ilustra, en el
Este asiático varios países pudieron movilizar su población, como voluntarios,
o el Estado se movilizo con todos sus recursos, para efectivamente controlar la
pandemia. En muchos de estos países el Estado goza de legitimidad y es visto
como relativamente eficiente, y sus directivas son mayormente seguidas. Son
eficientes y con un nivel de corrupción bajo, si se compara especialmente con
muchos países de Latinoamérica.
f.
También podría señalarse que varios países del
Este asiático utilizaron ampliamente la tecnología para combatir la pandemia, y
China fue el que más desplego todas las herramientas que ha podido desarrollar
en los últimos años en el campo de las tecnologías de la información y comunicaciones,
y que le permiten ser uno de los países más avanzados, sino el mas avanzado, del
mundo en ese campo. China pudo por ejemplo rastrear los casos de infectados,
controlar el movimiento de su población (a través de la instalación de
aplicaciones de salud en los teléfonos de las personas),
usar por ejemplo drones para enviar alimentos, medicinas, advertir a la gente
de cumplir las normas sanitarias, etc.
Se dice que más del 80% de la población en China tiene acceso a los teléfonos
inteligentes que permiten la instalación de esas aplicaciones. Asimismo, el uso
del dinero digital, del sistema de delivery para las compras, y otros medios,
que permiten mantener la llamada “distancia social” y evitar los contagios (áreas
en los que China si es el mas avanzado en el mundo), le permitió controlar en
forma relativamente rápida la pandemia.
El hecho de que China este bastante avanzado en la
tecnología de internet 5G es lo que le ha permitido también aplicar lo
anteriormente descrito, campo en el que los países de Latinoamérica están
bastante atrasados.
Por el lado del impacto en sus economías, la región del
Asia Oriental como se ve en los pronósticos tanto del Banco Mundial como del
FMI, resultaría la menos afectada en el mundo. En el cuadro 2 se ve que el Asia
Oriental, agrupado bajo Economías del Asia del Este y el Pacifico, tendría un
crecimiento de sus economías de solo un 0.5% anual el 2020. En el Cuadro 4
están las proyecciones del FMI, y el Asia Oriental esta agrupada aquí bajo el
termino Emergentes y en desarrollo del Asia, y se ve que sus economías caerían
0.8% anual el 2020, tasa que, aun siendo negativa, se compara bastante
favorablemente con los países de Latinoamérica, cuyas economías caerían a una
tasa anual de 9.4%.
5.
Conclusiones
La pandemia del COVID-19 ha infringido un terrible costo
a los países de Latinoamérica, en términos del numero de infectados y
fallecidos, y sumirá a sus economías en una profunda recesión en el 2020. Las
deficiencias en el sistema social y económico de estos países, y en el accionar
de sus gobiernos frente a la pandemia, se pueden ver como las principales
causas de eso.
Ha habido también errores y prejuicios que han
perjudicado y agravado la lucha contra la pandemia, pero por otro lado la región
del Asia Oriental, y China en particular, que han experimentado menores costos
para sus poblaciones y sus economías, ofrecen varias lecciones para Latinoamérica.
Entre ello está la necesidad de tener un Estado más eficiente para actuar rápidamente
en esas emergencias, de tener redes de seguridad social más amplias, del uso de
tecnologías de la información y comunicaciones, etc.
En suma, hay bastante que aprender de Asia, para poder
enfrentar futuras emergencias como la del COVID-19, y para poder alcanzar un
crecimiento sostenido y con más equidad. Hay que recordar que las economías de
Asia son las que más han crecido en el pasado reciente, crecen más en la
actualidad, y crecerán más en el futuro previsible, y especialmente en el
periodo postpandemia que se viene serán las primeras en recuperarse. En este
caso el papel de China es especialmente relevante. China ha sido el motor de la
economía mundial desde los primeros años de este siglo, y los países de
Latinoamérica se han beneficiado de la gran demanda por materias primas que
hubo del gigante asiático.
En esta pandemia China es la primera economía en
recuperarse y se espera también que pueda contribuir también a la recuperación
del resto de economías, como las de Latinoamérica. Asimismo, se ha visto que
China ha ofrecido a muchos países ayuda para enfrentar la pandemia, ya sea con
equipos o suministros médicos o enviando personal médico. Por lo tanto, se
espera que Latinoamérica y China puedan seguir estrechando sus vínculos no solo
económicos sino también de cooperación. Ya China es el mayor socio comercial de
varios países de la región, es el segundo a nivel regional después de EEUU, es
un importante inversor extranjero, y prestamista, y 19 países de la región ya
se han incorporado a su iniciativa de la Franja y la Ruta.
28 de junio del 2020
Bibliografía
-
World Bank: “Global Economic Prospects”, June
2020
Ver CNN website: “Peruvians cry out
for oxygen as coronavirus takes its toll”